Fosa de Pinar de Txabolapea 2 (Legutio, Araba/Álava)
UBICACIÓN | Pinar de Txabolapea, Legutio (Araba/Álava) |
VÍCTIMAS | 1 |
FECHA DE EXHUMACIÓN | 25 marzo de 2017 |
El 30 de noviembre de 1936 se inició la ofensiva del Ejército Vasco que tenía como objetivo tomar la ciudad de Vitoria-Gasteiz en la llamada Batalla de Villarreal. Los combates se sucedieron hasta el 25 de diciembre, provocando numerosas bajas entre los combatientes. A partir de ese día se estabilizó el frente.
Xabier Argote y Jon Etxezarraga, este último miembro de Eusko Propekzio Taldea y colaborador de Aranzadi, localizaron restos de material de cartuchería y cuero asociados a restos óseos humanos en la subida al monte Albertia, al borde de un camino de ascenso. El lugar se situaba a una altitud de 630 m. El hallazgo fue verificado por técnicos de Aranzadi en abril de 2016.
En la exhumación realizada el 25 de marzo de 2017 estuvieron presentes la alcaldesa de Legutio, Nekane Garaigordobil, junto con varios concejales; el parlamentario Julen Arzuaga y Aintzane Ezenarro, directora del Instituto Gogora, además de varios vecinos de Legutio.
El enterramiento de carácter superficial se encontraba en el margen derecho del camino de subida al monte Albertia, en una zona de pinar cubierta por vegetación. Los restos óseos estaban además desplazados por el crecimiento de las raíces de un pino situado a escasa distancia.
A consecuencia de lo anterior, el esqueleto se hallaba incompleto, estaba alterado y desbaratado pues no conservaba ninguna de las articulaciones completas. Sin embargo, estaban presentes los huesos de las extremidades superiores e inferiores, los coxales, los huesos del pie derecho y el occipital del cráneo. Por otro lado, solo se conservaban los arcos vertebrales y algunos fragmentos de costillas.
Asociado a los restos óseos se recuperaron unas suelas de calzado de tachuelas y varios cartuchos de munición.
El alto número de combatientes fallecidos que provocó la batalla en el monte Albertia, unido a la que en la misma actuaron batallones de todo el espectro ideológico, y ante la ausencia de algún elemento que pueda orientar una posible identificación no ha sido factible conocer su identidad.
Los restos fueron depositados en el Columbario de la Dignidad de Elgoibar en 2018.