Madarixa (Azkoitia, Gipuzkoa)

El Sr. Félix Etxeberria, vecino de Elgoibar, informó que varios vecinos del barrio de Madariaga/Maradixa (Azkoitia) le habían indicado el lugar en el que fue enterrada una persona durante el avance de las tropas sublevadas en la toma de Elgoibar desde Azkoitia sobre el día 21 de septiembre de 1936. Las mismas fuentes le comunicaron que la persona enterrada era un miliciano que presentaba una herida por arma de fuego en el rostro y cuyo cuerpo quedó abandonado en el camino, siendo enterrado a los tres días.

El 27 de marzo de 2004 miembros de la Sociedad de Ciencias Aranzadi acompañados por el Sr. Félix Etxeberria, realizaron una visita al alto en el barrio de Madarixa donde sabía existía un enterramiento clandestino en el margen izquierdo de la carretera de Elgoibar a Azkoitia. En esa ocasión se consideró muy complicado proceder a la recuperación de los restos ya que el lugar se había convertido en un vertedero con una gran acumulación de basuras.

En fecha 15 de diciembre de 2007, el grupo de estudio sobre memoria histórica Elgoibar 1936 localizó con ayuda de una pala mecánica y la retirada de abundante basura la inhumación en el fondo y centro de un nevero (Neberi zaharra), existente en ese lugar. El día 18 se comprobó que el esqueleto estaba completo y en buen estado de conservación.

La exhumación tuvo lugar el 22 de diciembre de 2007. El enterramiento se encontraba en el fondo de un nevero redondeado de más de 8 m de diámetro. El cuerpo estaba depositado en posición decúbito supino con las extremidades inferiores alineadas con el tronco. La cabeza se hallaba ladeada hacia la izquierda, la mano derecha se situaba sobre la sínfisis del pubis y la mano izquierda sobre la cadera del mismo lado.

Se estimó que correspondería a un individuo masculino de edad adulta joven, de entre 30 y 40 años. En relación con la causa de muerte, se observó un arrancamiento de hueso en el borde inferior del pómulo derecho que pudiera estar causado por el paso de un proyectil de arma de fuego.

Esta lesión sería concordante con la información aportada por los testimonios de que el miliciano enterrado presentaba una herida por arma de fuego en el rostro.

A las 12 de la mañana del mismo día de la exhumación tuvo lugar un acto de homenaje con la presencia de representantes de los ayuntamientos de Azkoitia y Elgoibar y la asistencia de un importante grupo de personas.

El equipo que intervino en la exhumación junto a los restos recuperados.

Por el momento no ha sido posible establecer su identidad.

Los restos recuperados fueron depositados. en el Columbario de la Dignidad de Elgoibar el 30 de enero de 2017, en un acto institucional organizado por el Instituto de la Memoria, la Convivencia y los Derechos Humanos, Gogora, y presidido por el Lehendakari, Iñigo Urkullu.