Fosa de Puente de Hierro 1 (Donostia-San Sebastián, Gipuzkoa)

En Donostia-San Sebastián, el golpe de estado del 18 de julio de 1936 fracasó en una primera fase, pero el 13 de septiembre del mismo año diversas columnas sublevadas entraron en la ciudad, deponiendo el régimen republicano. Tras los combates entre rebeldes y leales, los republicanos fusilaron a 156 vecinos de Donostia en la propia ciudad. La mayoría de estas ejecuciones tuvieron lugar el 30 de julio de 1936 y muchas de ellas tuvieron como escenario las cercanías del llamado Puente de Hierro (entonces conocido como Puente del Ferrocarril del Norte). En los meses posteriores a su entrada, las tropas sublevadas fusilaron, asimismo, a 400 vecinos de la ciudad de adscripción republicana. Los fusilamientos tuvieron lugar, la mayoría en Hernani, Oiartzun y Bera, pero hubo otros lugares secundarios de fusilamientos, tales como el Polígono de Tiro de Bidebieta, el monte Ulía y, también, en las cercanías del Puente de Hierro.

La zona del Puente de Hierro había sido un lugar de ejecución utilizada desde el comienzo de la guerra, por lo que no quedaba clara la autoría de las muertes. No obstante, la investigación histórica realizada por Iñaki Egaña, apuntaría a que el enterramiento de empleados municipales de Donostia ejecutados a manos de las fuerzas sublevadas. En este sentido fue clave la aparición de 6 botones característicos del uniforme de este cuerpo.

En julio de 2009 se estaban desarrollando unas obras en la zona del Puente de Hierro para realizar un nuevo acceso a la ciudad y cambiar el trazado del ferrocarril. Con ocasión de dichas obras se descubrió una primera fosa y varios días después una segunda fosa muy próxima a la anterior.

El hallazgo fue notificado al Juzgado de San Sebastián, por lo que este, en consecución del artículo 778 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, ordenó la investigación e intervención de los médicos forenses en la exhumación. Así pues, los médicos forenses D. Luis Miguel Querejeta y Dña. Patricia Rodríguez-Martínez llevaron a cabo la exhumación. Se solicitó asimismo la colaboración de miembros del Departamento de Antropología de la Sociedad de Ciencias Aranzadi por su conocimiento y experiencia en estas tareas.

La fosa que tenía forma cónica se localizaba en un suelo de arena y limo de los aportes del río. Se hallaban inhumados tres individuos, todos ellos de sexo masculino. El primero de ellos se encontraba apoyado sobre su lateral derecho y correspondía a una persona de edad adulta madura. Como elementos asociados se recuperaron un zapato, una hebilla y varios botones de nácar de camisa.

El Individuo 2 estaba en posición decúbito prono y se estimó una edad de 30 a 50 años. Relacionados con él se encontraron seis botones de nácar.

El Individuo 3 estaba en posición sentada y completo. En el húmero derecho mostraba una fractura perimortem por paso de proyectil. El aspecto más destacado consistió en la presencia de cinco botones localizados en hilera en el tórax que tenían la inscripción "SS". Esto orientaba a considerar que se trataba de un funcionario municipal. Junto a estos se hallaron otros elementos de la ropa como botones de nácar, una hebilla y el fragmento de un cinturón.

El elemento principal para establecer una orientación sobre la identidad de estas personas vino dada por los botones con la inscripción "SS", que indicaba que se trataba de un empleado uniformado del Ayuntamiento: bombero, guardia urbano, sereno, miembro de la banda de música municipal, etc.

Descartadas varias personas asesinadas por los republicanos y otras asesinadas por los franquistas, entre los agentes municipales cabía la hipótesis de que uno fuera Millán Zabala Fernández. Por otro lado, familiares de José Zubiarrain Zabaleta se pusieron en contacto con Aranzadi ante la posibilidad de que estuviera entre los exhumados.

Las pruebas genéticas de cotejo entre los restos óseos y las muestras indubitadas realizadas por el Instituto Nacional de Toxicología dieron resultado positivo y se confirmó que las dos víctimas anteriormente propuestas se hallaban en la Fosa 1, y corresponderían a los Individuos 1 y 3, respectivamente. Estas víctimas fueron asesinadas el 27 de septiembre de 1936

Los restos de José Zubiarrain fueron entregados a su familia.

Los restos de Millán Zabala Fernández y del tercer individuo, sin identificar, fueron depositados en el Columbario de la Dignidad de Elgoibar en un acto institucional organizado por el Instituto de la Memoria, la Convivencia y los Derechos Humanos, Gogora, celebrado el 9 de febrero de 2018.