Fosa de Matazal (Zaldibia, Gipuzkoa)

La fosa de Matazal en Zaldibia, fue la primera fosa de la Guerra Civil exhumada en Euskadi siguiendo una metodología científica. El vecino de Zaldibia, Sr. Martín Ibarguren Tolosa, se puso en contacto con la Sociedad de Ciencias Aranzadi para comunicar que conocía la existencia de una fosa en terrenos de su caserío Irastorza Goikoa. De hecho, fue su padre quien enterró los cadáveres que halló en el camino próximo al manzanal de su propiedad en verano de 1936.

La fosa fue localizada en el lugar exacto indicado por el Sr. Ibarguren, a pesar de que lo que era un manzanal se había convertido en un bosque con densa vegetación. La exhumación se desarrolló entre los días 9 a 11 de septiembre de 2002, bajo la dirección de Jesús Tapia y Francisco Etxeberria.

Se realizaron tres zanjas, una más amplia y otra más pequeña de 2,2 m para ir acotando el área de la fosa. Esta tenía una configuración rectangular. En la misma se encontraban inhumadas dos personas:

El Individuo 1 estaba en posición decúbito supino. Se estimó que tenía una edad próxima a los 20 años. En el cráneo tenía un orificio ovalado de entrada de proyectil de arma de fuego en el parietal izquierdo.

El Individuo 2 se hallaba en posición decúbito prono. También se estimó una edad cercana a los 20 años. En relación a la ropa se recuperó un cierre de cremallera y dos fragmentos de hebilla.  En el parietal izquierdo se observó un orificio irregular en forma de cono de salida de proyectil de un disparo. En el proceso de limpieza en el laboratorio se encontró en el interior del cráneo un proyectil blindado de 9 mm de diámetro. Otro fragmento metálico se localizaba en una vértebra lumbar.

Se plantearon varias hipótesis sobre la posible identidad de estas víctimas, pero no ha sido confirmada ninguna de ellas.

Los restos recuperados en la fosa de Matazal (Zaldibia) fueron trasladados y depositados en el Columbario de la Dignidad de Elgoibar en enero de 2017.